20091202

Demoliciones de Posmópolis: turismo.

Llegué a Posmópolis con lentes oscuros. La agencia de viajes prometió que mi estancia sería placentera. Me imaginaba en la costanera de Posmópolis acostado, tomando el sol, ingiriendo las típicas bebidas de la región:(...)

Del aeropuerto de la ciudad a la costanera de Posmópolis, tomé el tren ligero. Desde la altura tenía amplitud del panorama en mi camino al sol y al goce de los cuerpos bronceados: dominio postal, fotográfico, icónico: azoteas sin gente, llenas de tinacos, antenas parabólicas, cables en desuso, ropa tendida, jaulas (...) ahí solo flotaban las ilusiones sostenidas en los últimos años. Era un fin de semana prometedor.

Posmópolis, Santísima Posmópolis.